Descanso y vamos empatando

No recuerdo el tiempo que hace desde que no he visto un partido del Real Jaén en directo. He de reconocer que si no es así desde hace diez años o más, sí que he seguido los vaivenes del equipo por medio de puros resultados. Ni sé cómo juega ni los jugadores de los que dispone ni si se merece la posición final o no. Sin embargo, estoy ahora mismo reproduciendo un vídeo en YouTube en el que el equipo blanco está disputando su último encuentro de la temporada, el que le dará el ascenso a Segunda Federación. O no.

Y no lo digo porque no sé si ocurrirá. En estos momentos se está cumpliendo la media hora de juego y el gentío presente en el nuevo estadio de La Victoria está viendo perder a su equipo por un tempranero gol del Central, el rival sevillano que está haciendo trizas la ilusión jiennense. Pero bueno, queda mucho, que es lo que se suele decir cuando las cosas pintan mal. Aunque bueno, están jugando bien. Supongo, no tengo con qué comparar estas tesituras.

En estas situaciones siempre recuerdo lo que yo pensaba cuando era pequeño y escuchaba a alguien decir que hacía 20 ó 15 años que no practicaba tal cosa o que no visitaba tal sitio, por ejemplo. Me parecía admirable cómo esa persona recordaba algo que había pasado hacía tanto tiempo. A la vez, también me extrañaba que una persona durara tanto tiempo con vida. Eran pensamientos de un niño que no sabía de qué iba la cosa de los adultos ni cómo se entretenían. Era algo tan ajeno a mí que me parecía irreal.

Ahora soy uno de esas personas que cuentan que la universidad la terminó hace 11 años, que el Mundial de fútbol se ganó hace 15 y que hice la comunión hace 23. Una brutalidad lo que crecemos. Ahora mis eventos consisten en despedidas de soltero, bodas y nacimientos de bebés. Todo ha pasado bien rápido sin que podamos frenarlo. Por una parte me alegra vivir tantas cosas que pueda recordar y me consuelo pensando que cada vez la vejez se va retrasando más. Seguimos viviendo y seguimos contando, que es importante. Así nunca falta el tema de conversación en BlaBlaCar.

Mientras tanto los minutos siguen pasando y la incertidumbre siempre está presente. Tampoco sé lo que me deparará la siguiente semana, por suerte totalmente distinta a una oficina y a Madrid. Y de repente, gol, justo al borde del precipicio. Ha llegado el descanso y vamos empatando. por suerte, todavía queda mucho. También en la vida.

Mi Twitter: @Ninozurich
*Fotografía tomada de Diario JAÉN.